Instituto perdió 3-2 frente a River en el Monumental de Alta Córdoba, y de esta manera acumula su cuarto partido sin conocer la victoria, lo más sorprendente es que los jugadores se retiraron del estadio sin dar declaraciones a la prensa.
Desde el inicio, el partido estuvo caldeado. En un cruce entre Nicolás Dubersarsky y Maximiliano Meza, el jugador glorioso lo chocó al millonario que salió del campo de juego y se estrelló contra una de las rejas de ingreso, lo que provocó un fuerte susto, se frenó el partido y hasta no verificar que el 8 de River estaba bien, no se reanudó.
Con mayor manejo de pelota por parte de la visita, los de Dabove apostaban por el contraataque, y así llegó el primer gol del partido.
Pase en profundidad para Gregorio Rodríguez, que abrió sus piernas para dejar pasar la pelota y que González Pirez quede derrotado, con campo para correr, el 7 manejó la pelota hasta el área y en el mano a mano con Armani, definió raso, fuerte al primer palo.
Marchaban a los vestuarios con La Gloria en ventaja; en el complemento no cambió mucho la forma de juego. Quizás el Millonario fue más contundente a la hora de atacar.
A 10 minutos del inicio del segundo tiempo, Colidio le flitró una pelota a Echeverri dentro del área, que remató y tapó Roffo, sin embargo el rebote le cayó a Pablo Solari, la empujó y tablas en el marcador.
A los 63′, desde un tiro de esquina para River, Paulo Díaz de cabeza ponía en ventaja a los suyos.
Diez minutos más tarde, se cumplió la ley de “Dos cabezasos en el área, terminan en gol”, quizás con un gris y es que no fue de cabeza justamente; lateral de Lucas Rodríguez, peina Russo, en segunda instancia lo mismo hace Suárez y por atrás apareció Jonas Acevedo que punteó la pelota y se la esquinó a Franco Armani, 2-2.
Se cerraba un poco el encuentro y todo indicaba que el 2-2 era un hecho, pero desde los pies de Gonzalo “Pity” Martínez, una genialidad para dejar mano a mano a Colidio, que lo batió a Roffo y puso el 3-2 en el marcador, que terminó siendo el resultado final.